Si el sistema de depósito adicional Crux de Camelbak ya nos parecía bueno en cuanto a fiabilidad (y por tanto resistencia y duración), y facilidad de uso en prácticamente cualquier situación, este Fusion incorpora interesantes -y curiosas- novedades.
La más llamativa, sin duda, es la cremallera estanca en la boca de llenado, que deja atrás el gran tapón tocado de asa rígida.
Esta simplificación, hace que el peso disminuya drásticamente, en un 30%.
A pesar de ello, la robustez del depósito se aprecia desde el primer momento, tanto en el material principal y sus soldaduras, como en la cremallera estanca Tru Zip.
Para hacer cómodo el llenado (con una sola mano), cuenta con un asa integrada.
Como siempre, el tubo es desmontable gracias al conector Quicklink, sin peligro de fuga de agua.
Para evitar el goteo en marcha, o durante su transporte, la boquilla tiene una llave para cerrar el paso del agua.