El diseño limpio y minimalista de la primera Catamount ha dado paso a una imagen musculosa. Pese a ello, no ha penalizado ni un solo dígito en la báscula. La Catamount 2 mantiene peso, drop y propósito.
Apreciamos cambios en el tejido y protecciones del upper. También en la zona trasera, donde la mediasuela abraza la caja talonar para ofrecer más soporte y por tanto, estabilidad.
Una zapatilla que no ha perdido la ética para ofrecer rapidez en los movimientos con buen acto de amortiguación a cargo del DNA Flash, una de las espumas más efectivas de Brooks. A ello se une una nueva placa interna SkyVault, una “catapulta” que te impulsa hacia la siguiente zancada y al mismo tiempo ofrece protección.
La suela se ha rediseñado, acercándose a la Cascadia 16, lo que da licencia para adentrarse en zonas técnicas y agrestes.
Sigue contando con los anclajes para las polainas y un sencillo y ligero sistema para sujetar el resto de la lazada.